La postergación del calendario electoral gana fuerza como alternativa ante riesgos epidemiológicos.
El gobierno está cada vez más convencidos de la necesidad de introducir cambios en las fechas previstas para las primarias y las elecciones generales de este año, ya que observan con preocupación las noticias que llegan desde el Hemisferio Norte sobre el rebrote de coronavirus con una cepa más contagiosa.
Sobre la realización de las PASO, el titular de la Cámara de Diputados se preguntó si tiene sentido «votar dos veces en 50 días». Agregó que «crecer, vacunarnos y trabajar unidos tienen que ser los tres principios rectores» para este año.
La prórroga al último trimestre de todo el calendario electoral del año, pero sin eliminar las PASO, con primarias en septiembre y generales en noviembre, gana fuerza en el Gobierno y en la coalición del Frente de Todos como una de las alternativas ante la necesidad de adaptar el llamado a elecciones ante las particularidades epidemiológicas de 2021, un año atravesado por la pandemia y al que el oficialismo encara con una prioridad casi absoluta: la de completar la vacunación de los grupos de riesgo para llegar, finalmente, a la ‘inmunidad de rebaño’.
El gobierno y en el FdT están, de hecho, cada vez más convencidos de la necesidad de introducir cambios en las fechas previstas para las primarias y las elecciones generales de este año, ya que observan con preocupación las noticias que llegan desde el Hemisferio Norte sobre el rebrote de coronavirus con una cepa más contagiosa.
En este marco, el oficialismo tiene todo su esfuerzo desplegado en el avance de la campaña de inmunización contra la Covid-19 y en las previsiones que indican que la ‘inmunidad de rebaño’ (tener vacunada a la mayoría de la población) podría alcanzarse entre agosto y septiembre, aunque por otro lado la experiencia de 2020 muestra que el pico invernal suele coincidir con la mayor cantidad de contagios.
Al respecto, el dirigente del Frente Renovador consideró que «tomando como base que venimos de un gobierno que fracasó (por Cambiemos), y se le sumó la pandemia, creo que el Gobierno está encarando bien cuáles son las prioridades».
«El desafío que tenemos este año es la recuperación económica», siguió el dirigente, que planteó que «la recuperación del ingreso de todos los argentinos y la recuperación del poder de compra» deben ser prioridades del 2021, y añadió «que allí el clave el rol del Estado protegiendo y cuidando».
Además, el propio Presidente, en la entrevista que Página 12 publicó también hoy, subrayó la existencia de una «razón epidemiológica» que recomienda evitar aglomeraciones de gente y aseguró que a la hora de definir las fechas de las elecciones será necesario «ver en qué estado de la pandemia» está el país «para la época en la que está convocada la PASO».
«Hay una ley que las establece (a las primarias), que a mí me parece muy buena, y (la suspensión) es un tema que tendrá que ver en su momento el Congreso. Otros plantean postergarlas hasta septiembre y la elección en noviembre», señaló Alberto Fernández en ese reportaje.
En cualquier caso, en la Casa Rosada hay una definición consolidada y es que el jefe de Estado no se involucrará activamente en el debate por modificar la legislación electoral, aunque tampoco impedirá que se abra la discusión.
«El Presidente no va a encabezar ni a clausurar el debate», graficó en ese sentido una fuente oficial en diálogo con Télam.
Sin embargo, la alternativa de postergar por 30 días las primarias y las elecciones generales no es la única que se menciona por estas horas en el oficialismo.
Por último, más allá de los debates, en el Gobierno siguen trabajando para organizar las elecciones tal como está previsto en la ley: esta semana el Ministerio de Interior difundirá el pliego licitatorio con las condiciones para la empresa privada que estará encargada de la transmisión de los resultados de cada mesa durante el escrutinio provisorio.
La licitación que se realizará este año refiere a transmisión al Correo de los resultados en cada centro de votación y no el recuento provisorio de los votos (el válido es el escrutinio definitivo), que seguirá en manos de SmartMatic, ganadora de una licitación realizada en mayo de 2019, en el último año de la gestión de Mauricio Macri.